En la vuelta, aunque lograron pasar a la siguiente ronda por marcador global, perdieron por 1-0 y Causio, al irse sustituido, se mostró molesto e hizo duras declaraciones, por las que el club lo multó. En la semifinal, le anotó al Catanzaro en la vuelta, que ganaron por resultado 4-2, y con ese gol, similar a uno que le había hecho a la selección argentina unos pocos días antes, «desparramó a toda la defensa calabresa y puso en éxtasis a todo el estadio».