Y en la Copa el papel fue desastroso, ya que el equipo solo eliminó al Rayo Vallecano y cayó en la segunda ronda frente a un Castellón que fue la revelación de la temporada. Fue el 8 de julio de 1972 de nuevo en el Santiago Bernabéu, pero esta vez frente al Atlético de Madrid y con un Claramunt lesionado que aun así entró al terreno de juego y luchó como el que más.